Pienso en nuestros antepasados quienes vivían y sobrevivían acosados por toda suerte de enfermedades y pestes mortales.
En nuestros tiempos pese a que nos siguen inquietando males como el cáncer, ya no nos atormentan como regueros de muerte el tífus, la tuberculosis y una larga lista de terribles amenazas de antaño. Hasta que, de súbito, se nos apareció hace algunas décadas entre otros, el sida y ahora último el ébola.
Imagino a los habitantes de entonces, aterrorizarse ante la sola palabra cólera que era sinónimo de una pronta visita sin regreso al cementerio.
Aunque de dimensiones bastante más acotadas, el tal ébola nos envuelve en el marco de una vulnerabilidad presumible, por lo cual celebro el toque de humor que generalmente emana en medio de circunstancias de preocupación.
A mis amables lectores del extranjero trascribo la historia, sin saber si la recibimos de alguna latitud lejana o cercana o si nació en nuestro suelo.
El hecho es que un señor aduce estar enfermo de débola y no de ébola. Ante las demostraciones de estupor de su interlocutor, el afectado de débola se explica:
Claro. Débola la luz, débola cuenta del gas, débola del agua, débola del colegio de los niños, débola del crédito bancario vencido, en suma padezco de débola.
16 comentarios:
Ja ja ja. Muy bueno
Sabes el del cólera?
Ese fue un chiste de la época en que el cólera hacía estragos. Se lo oí contar a mis abuelos.
Y qué es el cólera Manolito?
Pues mira mi niño, es una enfermedad en la que cagas y cagas y terminas cagando en el cementerio
Disculpa por la ordinariez.
Un abrazo.
Un toque de humor siempre viene bien, aunque sea a costa del ébola. Un abrazo
Me has hecho reír. Cuando leí el título, creí que era una confusión con el nombre Débora, y que estaba enfermo de Débora.
Parece que la ciencia avance con las enfermedades.
Viendo tu foto me ha recordado a mi abuelo que cuando visitaba a los enfermos decía que había que ventilar y limpieza.
Un abrazo.
Hola Armando:
Jajaja. Aunque ordinariez, es muy divertida...y certera.
Retribuyo el abrazo.
Hola Felipe:
Sí. A costa y a consecuencia del ébola.
Abrazo.
Hola Mari:
Los tiempos cambian, amiga, pero las precauciones mínimas de higiene son las mismas.
Abrazo.
Hola Gabriela:
Los enamorados de Débora seguramente están enfermos...de amor por ella.
Abrazo.
Es propio del humano, el chiste aún con estas cosas. Pero estuvo muy bueno y oportuno apreciado Esteban. Ojalá que los humanos, cono todo respeto, aprendan de los males y se "den bola" entre ellos para saberse organizar ante cada una de estas "Siete" Plagas que por algo van apareciendo....
Pois, nada melhor que um homem com sentido de humor para desanuviar a nossa apreensão.
Um abraço e uma boa semana
De acuerdo Elvira. Es una manera, en cualquier circunstancia, que nos alivia los males.Venga de quién venga, amiga.
bien dicen, amigo Lao, que el hombre...es el peor enemigo del hombre.
Amigo, gostaria de lhe pedir o favor de passar pelo Sexta a ver se já consegue comentar.
Vou pedir o mesmo à Lúcia já que foram os dois amigos que se queixaram.
Abraço e obrigada
Pasaré con todo gusto, enseguida, apreciada Elvira.
jajaja... Qué bueno amigo! Temible enfermedad el débola, extendida entre mucha gente que, tomándolo en serio, sufren muchos en mi país. Beso
Pareciera, RosaMaría, que va en retirada a nivel mundial. Ojalá sea así porque ya basta de calamidades, aparte del ébola.
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