Vieja es la discusión acerca de si los cronistas deportivos deben haber jugado fútbol (o practicado otros deportes, claro). Y, en este marco, los matices son enormes. Yo soy de aquellos que piensan que para ser un especialista en ópera, no hace falta saber cantar como Plácido Domingo.
Sin embargo no se crean que nunca le he dado a la redonda. Cierto, ni por Colo Colo, la U ni Cobreloa...menos por River o el Real Madrid. Pero sí por EL CLAN 66, como lo atestigua la nota de prensa que se incluye en este post. El Clan 66 era el equipo de baby fútbol de la ya desaparecida Radio Chilena, CB 66, la más prestigiada emisora de Chile en esos lejanos años de la década de los 60. Sobre todo entre la juventud. Fuimos los favoritos de las entonces llamadas "calcetineras" quienes llenaban el también ya desaparecido Gimnasio Nataniel de la calle del mismo nombre, circundante con el centro santiaguino. La emisora tenía tal arrastre, que en los duelos frente a equipos de otras radios, nosotros nos convertíamos en locales absolutos y los adversarios en visitantes sin vuelta. Y entre los cuadros adversarios estaban los colegas de emisoras de la categoría de Cooperativa o Minería. No me imaginaba que años más tarde, yo pasaría a la propia estación que representaba a la Sociedad Nacional de Minería, en una "transferencia" tipo Cristiano Ronaldo desde el Manchester al Madrid. No me crean mucho la comparación, pero en todo caso la citada "transferencia" se hacía por otros factores que nada tenían que ver naturalmente con las habilidades para jugar baby fútbol.
Cuando el apoyo del público se dividía en parte, era con ocasión de los encuentros con equipos que no representaban a otras radios, sino a grupos de artistas que en esos tiempos gozaban de justificada fama.
En la foto número uno, extractada de la Revista Ritmo, también señera en esa época desde el punto de vista de las inquietudes juveniles, nos estamos saludando al término de un "intenso" partido, jugadores de nuestro Clan 66 y los Por la Chupalla, elenco que entre sus figuras tenía a Pedro Messone y el pollo José Alfredo Fuentes. Obviamente a nadie le importaba en ese lejano entonces la similitud enorme de nuestras camisetas a rayas. El que está a mi lado izquierdo (mirando la foto), es Pedro Messone. A mi costado derecho, de frente a la cámara, se ubica Miguel Ángel San Martín, dilecto amigo quién regresó a Chile no hace mucho, luego de ejercer por 30 años la corresponsalía de Radio Cooperativa en Madrid. Quién se está abrazando "con el 8" contrario es con unas cuantas primaveras menos en su cuerpo, el pollo Fuentes.
Ah...del resultado del partido ni me acuerdo, pero tras tantas lunas como que ni importa.
La otro foto que estoy compartiendo con ustedes, también amarillenta con el paso del tiempo, tiene que ver con uno de mis primeros autos, en época todavía sin control remoto para abordar puertas. La mención a Puntito, se debe a un personaje que yo hacía, conversando conmigo mismo en un programa matinal de música, noticias, deportes y chistes que iba por Radio Chilena cada mañana entre 6.00 y 9.00 horas.
No sé si todo tiempo pasado fue mejor como suele decirse, pero aquel, al menos para mi y los envueltos en esos recuerdos, resulta inolvidable.
Texto de foto:
El partido ha terminado y los jugadores se abrazan cordialmente, como buenos amigos que son. Pedro Messone, Esteban Lob ("Puntito"), Miguel San Martín, el Pollo, Pato Esquivel y Juantito Moya. Vencedores y vencidos se confunden en un solo abrazo, que demuestra lo correcto del partido y de la gran mayoría de ellos, que como dice Hernán Solís, fueron "de guante blanco". Después del encuentro, Puntito, perdón, Esteban Lob, corrió a transmitir el partido siguiente de la competencoa oficial, del fútbol profesional.
Texto de foto:
UN AUTO PARA PUNTITO O UN PUNTITO DE AUTO
Según los graciosos que nunca faltan, ESTEBAN LOB tiene un auto tan chico que parece que no lo hubiera comprado para él, sino que para su personaje PUNTITO.
El popular animador de "Enfrentando el día"no se molesta por las bromas, y reconoce que su cacharrito le queda "un poco corto de tiro", aunque para transportar su humanidad le basta y sobra. "Total, he progresado en relación a cuando andaba en bicicleta", dice.