Valdivia, para muchos la ciudad más hermosa de Chile
En la ruta desde la carretera de Santiago al sur de mi país, hay un desvío que conduce a Valdivia. Tuve la ocasión de recorrerlo hace algunos días, en medio de los inconvenientes naturales generados por trabajos ya de larga data y que no van a finalizar muy luego, destinados a mejorar la estructura caminera que conduce a aquella ciudad fluvial, ubicada a 844 kilómetros de nuestra capital.
Debido a aquellas labores, el tránsito desde y hacia Valdivia, es interrumpido en ambos sentidos alternativamente y por cierto luego regularizado, por lo que no es posible hacer otra cosa que manejar con la intención de recuperar en parte el tiempo perdido. Por lo mismo a quienes íbamos en el vehículo, nos resultó imposible parar y fotografiar un letrero enormemente ingenioso que estaba en lo alto de la entrada a un predio rural.
Seguramente cansados de constantes preguntas sobre lugares y personas, los habitantes de aquella propiedad colocaron la inscripción con todas las de la ley.
Se trata de una colorida invocación, en madera y muy bien pintada, que se ve como un verdadero clamor: ¡AQUÍ NO ES!
A buen entendedor pocas palabras. Pienso que cualquier interesado en información, ahora preferirá buscarla en otra propiedad, pese a lo distante de los accesos.