martes, enero 19, 2010

¿Quién controla el caos en Puerto Príncipe?



Al tenor de las informaciones de la prensa internacional, en Haití reina el caos.

Incluso se dice que no falta ayuda, que viene generosa desde todo el mundo. Pero hay carencia de orden, escasean lugares apropiados para almacenar víveres y pareciera que al final de cuentas los físicamente más poderosos se quedan con la mejor parte.

Entre tanto resultan conmovedoras las escenas en que algunos comparten lo poco que les llega, en medio de su desamparo.

Me resultó demoledor lo dicho en la televisión española, acerca de la existencia en Puerto Príncipe de sectores casi intocados por el terremoto, adonde la vida sigue aparentemente normal, mientras tan cerca reina la muerte y la incapacidad de dar alimentación a los niños.

El egoísmo tradicional de algunos gobiernos genera reacciones impropias del momento, como cuestionar que otros países manden tropas para ayudar, en circunstancias que lo más importante es hoy disminuir el caos, encontrar nuevos sobrevivientes si los hubiera todavía y hallar cadáveres.

También electriza saber de quienes privilegian un poco de pasta de dientes en vez de un trozo de pan, para defenderse al poner el dentífrico sobre su nariz, de los espantosos olores que emanan de los restos humanos apilados.

Es en estas circunstancias que uno esperaría movimientos de más acción y de menos palabrería de los organismos internacionales.

14 comentarios:

Luis dijo...

Hola Esteban:
Tristes secuelas que pueden empeorarse con epidemias futuras.
Y mas tristes todavia las acciones de "algunos", que no se como llamarles...
El otro dia aparecieron unas imagenes estremecedoras del apaleamiento de un pobre desgraciado que habia cogido algo de comida...
Muy triste todo el panorama. Esperemos que haya alguien que sepa ordenar este caos.
Saludos,
Luis

Mary Rogers dijo...

Esto viene de siempre y creo que este es el momento de ordenar la isla. No sé cómo ni con quién, pero es un llamado de atención a la humanidad completa.
Te mando un abrazo y me alegro que estés circulando nuevamente por estas tierras:D

Gabriela dijo...

Lo que cuentas es parte de la naturaleza humana. La desesperación y el miedo pueden llevar a las personas a traspasar límites, cosa que de otra manera no harían.

fernando dijo...

Hola Esteban, lo que está ocurriendo en Haití es una señal de alarma para la humanidad entera que nos dice que nosotros algo estamos haciendo equivocado. Si pensamos que hace pocos meses casi todos los gobiernos del Mundo destinaron milliardos de dólares para "salvar" al sistema bancario internacional-uno de los principales culpables de la aún vigente crisis económica-,y por otra parte, con una pequeña fracción de esa gigantesca suma económica entregada a los Bancos se podrían haber evitado gran parte del sufrimiento que sufre el Pueblo Haitiano. En vano esperan los pobres de Haití ese tipo de ayuda.

Se pueden hacer muchas acusaciones.

Ojalá que la ONU incremente su compromiso en Haití en la medida requerida por el sufrimiento del Pueblo Haitiano.

Ricardo Tribin dijo...

Y lo grave mi estimado es que ese caos no es de ahora sino de mucho tiempo atras.

Un abrazo bien grande

MNB dijo...

Hola,Esteban:

Es muy triste lo que está pasando, aunque ha sido así desde siempre.
Hay mucha ayuda, pero en un momento de caos total, es muy difícil organizarse para repartir en forma ordenada y equitativa.
Esperemos que esto se vaya arreglando.

Cariños.

Diana Puig dijo...

Hola Esteban,
Espero que vayan encontrando la forma de organizarse mejor, pero pienso que es muy difícil para los que están allí adaptarse a tal tragedia, igualmente quiero pensar que poco a poco toda esa ayuda se administrará de forma controlada, que llegue a todos y si es verdad que los acuerdos entre algunos países por dar solución, debe de haber unos intereses de los que ahora parece impensable que se lo planteen, pero es así por mal que nos parezca.
Un abrazo amigo,
didi.

Marta Salazar dijo...

"acerca de la existencia en Puerto Príncipe de sectores casi intocados por el terremoto",

curioso, los medios alemanes dicen que está todo en ruinas, incluyo el palacio presidencial y los hoteles más caros...

yo, a la prensa espanola no le creería nada, ni lo que rezan,

ayer mismo, un amigo espanol me enviaba el link de un diario espanol sobre la situación política de Alemania, lo leí sin muchas ganas y te digo: es in cre í ble! es que realmente no tienen idea de nada! y lo dicen todo, pero como si fuera cierto y una cosas que no tienen ni pies, ni cabeza, que tú te preguntas: y esto? de dónde lo habrán sacado...

Terrible lo que pasa en Haití...

Daniel. Te invito a visitar http://eldeportero.wordpress.com dijo...

Tengo entendido que en Haiti no existe algo similar a nuestra Onemi (puedo estar equivocado), por lo que es explicable el que no haya un organismo que ordene la entrega de ayuda.
Saludos

Cheluca dijo...

Querido Esteban, lamentablemente no todo lo que sale en la televisión es lo que realmente está pasando en Haití. Reconozco que hay mucha covertura del desastre del vecino país, y que hay mucha ayuda, pero es más terrible aún de lo que muestran en televisión.
La gente que ha perdido toda su familia. La gente que no será enterrada apropiadamente sino en fosas comunes, cadáveres en las calles y bajo los escombros. Gente desesperada por comida y agua bajo el sol inclemente.
Haitianos que han asaltado camiones que van desde República Dominicana con la ayuda dejando graves a los ocupantes (disparos de escopetas cayeron sobre unos cuántos y todavía no se sabe si sobrevivirán).
Unos cuantos haitianos muertos a manos de los estadounidenses que repelieron una turba de haitianos que se querían subir al portaaviones a saquear.
Es demasiado terrible, más de lo que te puedas imaginar.
Y lo que viene no es fácil amigo, para República Dominicana no es nada fácil.
Un beso.

esteban lob dijo...

Cheluca:
Tremendo es lo que cuentas. Por cierto se trata de algo todavía peor que lo que muestran los medios, de por sí terrible.

Un abrazo.

¿Qué se teme en la RD?
¿Una invasión de desesperados?

Cheluca dijo...

Bueno mi querido Esteban, se teme que vengan en masa a este lado de la isla, por eso las fronteras las reforzaron. La inmigración haitiana a RD es mucha, aquí ellos trabajan en las construcciones y muchas veces se quedan. La persecusión de ilegales ha frenado un poco en estos días pero siempre es fácil ver camiones de gente que los llevan a la frontera.
Con esta tragedia esa fiscalización de ilegales ha frenado y hay mucha gente que ha ingresado al país que tenían visa, pero esta vez no es para visitar o trabajar, muchos de ellos han venido a quedarse debido a que han perdido todo (familia y las pocas posesiones). Así me comentaba mi suegra de una haitiana que vive por su casa con su esposo e hijos. Llegó a contarle que tenía más de 5 personas "allegadas" en su casa, una que había perdido a 18 de sus familiares, otro que había perdido a 5, ella misma que había perdido a su madre, y todo lo contaban como si fuera de manzanas que se estaba hablando y no de muertos.
El país tiene un gran desafío por delante, porque no somos un país con muchos recursos y para más agravar el asunto están mal administrados, entonces no podemos asumir una población que es del mismo tamaño que la población de RD, más pobre, con otra cultura, con otro idioma (el creole), es decir, no podemos dejar que nos "invadan" silenciosamente. Puede sonarte discriminatorio y racista pero hay que estar aquí para entenderlo.
Por mientras las calles se han llenado aún más de haitianas con bebés en los brazos pidiendo en las esquinas. Un montón de niños (he llegado a contar 11) en esquinas turnándose para pedir una moneda. Lo malo no es dar, el problema es dar a quien pertenece a una red manejada por indolentes (sí, está confirmado que hay gente que utiliza a los haitianos para pedir en las esquinas, como un negocio).
Podría seguir y abundar demasiado pero bueno, no te quito más tiempo. Un gran abrazo! (qué rico que volviste)

esteban lob dijo...

Cheluca:

Gracias por tu visión del asunto, a la luz de la realidad que vives en RD. El problema es grande, sin duda.

Alma Mateos Taborda dijo...

Comparto plenamente tus copnceptos. Conmueve esta dura realidad que presenta más angustia que soluciones. Un abrazo.