viernes, diciembre 30, 2016

Añoranzas

por estar mis musas en paro, reproduzco un post "del año del ñauca" como decimos en Chile.

dE JUEVES DICIEMBRE 27, 2007

La Viejita Pascuera
Datos para lectores del extranjero:
En Chile, en época de mi infancia, a Santa Claus se le conocía como el Viejito Pascual.
Con los años, derivó en el Viejito Pascuero.

Ese viejito, es el que trae regalos a los niños cada 24 de diciembre, los que son esperados con gran ilusión por todos los pequeños de cada familia, quienes por supuesto no dudan de la existencia del personaje.
Los mayores entre esos chicos, puede que ya no crean, pero por lo general no lo reconocen para estar libres del riesgo de quedarse sin regalos.
Mi nieto mayor tiene 8 años y dudo que todavía crea, pero tiene buen cuidado en no manifestar alguna avería en su fe.
En todo caso, estoy seguro que ni él ni mis otros 5 nietos leen este blog (el más pequeño apenas tiene 2 meses de edad), de modo que puedo darme el lujo de explicar la foto que contiene el presente post.

Quién aparece como Viejito Pascuero es en realidad una ... Viejita Pascuera.
Se trata de mi esposa, María Teresa, cargada de regalos para todos los nietos propios y para los sobrinos-nietos, en presencia de gran parte de la familia más directa, que integran sus siete hermanos, con sus respectivos cónyuges, en medio de la habitual curiosidad de mis suegros en esta fecha, ambos de más de 90 primaveras y que observan con cierto grado de perplejidad a sus bisnietos.

Cuenta mi señora que la tradición de la llegada del Viejito Pascuero en su familia, se ha traspasado de generación en generación.
Al cabo del tiempo, ella ha tomado el relevo, la indumentaria, la barba y los modos de precedentes viejitos pascueros, para solaz de grandes y chicos. De quienes todavía creen... y de quienes alguna vez creyeron.

CAMBIOS DESDE ENTONCES:
Mi nieto mayor ya está por cumplir 17 años y se apresta a su vida universitaria. El más pequeño, entonces de 2 meses, ahora tiene 9 años. Mis queridos suegros, quienes superaron con amplitud la barrera de los 90, ya partieron al infinito. Desde ese momento, cada familia dentro del familión celebra por separado la Navidad, al crecer en su cantidad de integrantes.  A mi esposa en la reciente celebración en mi casa, la reemplazo como Viejita Pascuera mi hija Paulina, pero en el fondo fue para cumplir con la linda tradición, porque el único que tal vez todavía cree en Santa Claus es mi nieto menor, aunque bien puede que nos haya "tomado el pelo" a todos.

MUY FELIZ 2017 PARA TODOS.

viernes, diciembre 23, 2016

Felicidades para todos


Escrito en este blog en el ya algo lejano 2007. Pero por estos días, creo que no pierde vigencia.


QUERIDOS AMIGOS:

DONDE SE ENCUENTREN...JUNTO A SUS SERES QUERIDOS... PARA TODOS SIMPLEMENTE

¡FELICIDADES!

POR SOBRE CREENCIAS Y NO CREENCIAS,  POR SOBRE DOGMAS O PENSAMIENTOS LIBRES, HAGAMOS QUE NUESTROS NIÑOS GOCEN EL ESPÍRITU QUE CONLLEVA LA FECHA.

QUE SU ALEGRÍA SEA LA NUESTRA,  SUS SUEÑOS  NUESTROS SUEÑOS.

martes, diciembre 13, 2016

"Seguimos trabajando"


Resultado de imagen para Entrevistas a futbolistas Chile



Miles de aficionados al fútbol envidian sana o insanamente (siempre se atenúa la falta hablando de envidia "sana") a los reporteros que entrevistan a los deportistas. Los hinchas tienen gran capacidad para descalificar a aquellos profesionales del micrófono pensando"mmmm, y a ese más encima le pagan". Ciertamente esa actividad se trata de un trabajo, pero para qué hacer ostentación de lo que para el hincha suena a un privilegio. Pues bien; la estación que transmite por televisión-cable los partidos de la Liga Chilena, muestra semana a semana a sus entrevistadores, cayendo en un fraseo habitual y desconsiderado: 

"Seguimos trabajando y acá nos encontramos con el goleador del partido" o bien "continuamos con nuestro trabajo para consultar al portero cómo atajó el penal".



Esos miles de trabajadores en labores de sol a sol  y que cuando van a mirar a sus favoritos al estadio por supuesto pagan su entrada y no tienen acceso a sus astros preferidos del fútbol, no merecen que al cumplir funciones como las descritas, quienes ejercen esa actividad les digan constantemente "seguimos trabajando". Es verdad que lo están haciendo, pero para qué echarlo en cara con tanta ligereza y sin necesidad, si nuestro idioma es rico en sinónimos.