Empiezo por agradecer a mis amigos cibernéticos de antes y de ahora, quienes al pie de mi entrada anterior durante una breve ausencia desde estas páginas, me manifestaron una vez más su amistad.
Me refiero a Armando, Esteban, Marcos, Manuel, PMPilaR, Amatista doble de España; Liliana, Rosa María, Marcelo y Lao de Argentina; Gabriela y Jorge del Perú; Rud y Rafael Humberto de Colombia; Boris Estebitan de Ecuador y a mis compatriotas chilenos Taty y Roberto, quién me menciona la presentación radial que hice hace bastantes décadas, del recientemente fallecido James Last.
Reconforta, Roberto, que tras tanto tiempo, alguna actividad específica que yo realizara en mi largo y agradable peregrinar por emisoras de radio y televisión, haya quedado en el recuerdo de alguien y que me lo haga saber. Aunque en este caso sea a raíz de la muerte de un eximio de la música.
También agradezco las referencias de ustedes a la Copa América y al título de campeón de Chile, competencia que unió los países de esta parte del mundo en aras del fútbol y que durante algunas semanas fue motivo de atracción mundial.
Pero la alegría del reencuentro con ustedes, contrasta en mis pensamientos con la convicción de que en mi patria hay algún tornillo suelto en la lucha contra la delincuencia, flagelo que día tras día parece aumentar, con escasos resultados en la búsqueda de culpables. Las novedades en la materia son los súbitos asaltos en Estaciones de Servicio, en que en segundos a un infortunado ciudadano lo intimidan los malhechores que llegan a su costado en un auto robado, le obligan a entregar el teléfono personal, la billetera ( si hay una dama, su cartera) y el propio coche, con su llave, para partir los delincuentes en el primer vehículo y en el auto de su nueva víctima, raudamente. O, es otra novedad en nuestra nación, entrar los amigos de lo ajeno en una operación relámpago a un restaurant, intimidar a los comensales, expropiarlos de sus pertenencias y alejarse con prontitud en una acción que no pasa del minuto y medio.
Lo peor es que los afectados, al cabo de días y semanas, quedan con la sensación de contar con menos garantías que los delincuentes, si es que estos son habidos.
Como ejemplo del teatro del absurdo en que estamos inmersos, hace poco en un encuentro futbolístico por Copa Chile efectuado en la ciudad de Talca, entre el local Rangers y Universidad de Chile, que fue suspendido por graves desmanes, en que partidarios del club visitante desprendieron butacas que luego lanzaron a la cancha o a la cabeza de quién estuviera a mano, la autoridad respectiva culpó al club local por el hecho de que los asientos arrancados...no estaban lo suficientemente asegurados al piso.¿¿¿¿¿¿¡¡¡¡¡¡¡
Serían más culpables los asientos colocados no a prueba de vándalos, que los antisociales que los usaron como proyectiles.
Nadie está libre y en esa materia la situación es muy democrática. Al que le toca le toca. Hace algunos días al volver a nuestra casa con mi esposa, descubrimos que desconocidos habían entrado antes sacando de cuajo la parte baja de un ventanal, pero aparentemente fueron sorprendidos por un censor conectado al sistema de alarma, por lo que presumiblemente escaparon por donde mismo habían entrado. Y eso que vivimos en un condominio ¿protegido? por vigilantes. En todo caso, sin duda que comparativamente la sacamos barata.
Reconforta, Roberto, que tras tanto tiempo, alguna actividad específica que yo realizara en mi largo y agradable peregrinar por emisoras de radio y televisión, haya quedado en el recuerdo de alguien y que me lo haga saber. Aunque en este caso sea a raíz de la muerte de un eximio de la música.
También agradezco las referencias de ustedes a la Copa América y al título de campeón de Chile, competencia que unió los países de esta parte del mundo en aras del fútbol y que durante algunas semanas fue motivo de atracción mundial.
Pero la alegría del reencuentro con ustedes, contrasta en mis pensamientos con la convicción de que en mi patria hay algún tornillo suelto en la lucha contra la delincuencia, flagelo que día tras día parece aumentar, con escasos resultados en la búsqueda de culpables. Las novedades en la materia son los súbitos asaltos en Estaciones de Servicio, en que en segundos a un infortunado ciudadano lo intimidan los malhechores que llegan a su costado en un auto robado, le obligan a entregar el teléfono personal, la billetera ( si hay una dama, su cartera) y el propio coche, con su llave, para partir los delincuentes en el primer vehículo y en el auto de su nueva víctima, raudamente. O, es otra novedad en nuestra nación, entrar los amigos de lo ajeno en una operación relámpago a un restaurant, intimidar a los comensales, expropiarlos de sus pertenencias y alejarse con prontitud en una acción que no pasa del minuto y medio.
Lo peor es que los afectados, al cabo de días y semanas, quedan con la sensación de contar con menos garantías que los delincuentes, si es que estos son habidos.
Como ejemplo del teatro del absurdo en que estamos inmersos, hace poco en un encuentro futbolístico por Copa Chile efectuado en la ciudad de Talca, entre el local Rangers y Universidad de Chile, que fue suspendido por graves desmanes, en que partidarios del club visitante desprendieron butacas que luego lanzaron a la cancha o a la cabeza de quién estuviera a mano, la autoridad respectiva culpó al club local por el hecho de que los asientos arrancados...no estaban lo suficientemente asegurados al piso.¿¿¿¿¿¿¡¡¡¡¡¡¡
Serían más culpables los asientos colocados no a prueba de vándalos, que los antisociales que los usaron como proyectiles.
Nadie está libre y en esa materia la situación es muy democrática. Al que le toca le toca. Hace algunos días al volver a nuestra casa con mi esposa, descubrimos que desconocidos habían entrado antes sacando de cuajo la parte baja de un ventanal, pero aparentemente fueron sorprendidos por un censor conectado al sistema de alarma, por lo que presumiblemente escaparon por donde mismo habían entrado. Y eso que vivimos en un condominio ¿protegido? por vigilantes. En todo caso, sin duda que comparativamente la sacamos barata.
19 comentarios:
Hola, Esteban:
Me alegra tu regreso, espero lo hayas pasado muy bien en tus vacaciones: Agradezco tus manifestaciones de afecto y amistad.
Eso de la inseguridad es un mal generalizado, por aquí se roban hasta un hueco y la impunudad se campea muy oronda.
Un abrazo.
Bienvenido de nuevo Esteban y gracias por el comentario efectuado a tu regreso.
Me alegro que el percance en tu vivienda, haya quedado en sólo un pequeño susto.
Un fuerte abrazo.
Esteban:
Nada que agradecer. El mundo bloguer es una pequeña familia virtual donde nos visitamos y crecemos como amigos. Tiempo llevo y me reconforta haber encontrado varios amigos maravillosos.
De tus pensamientos referente a situaciones acaecidas en nuestro territorio. ¡Qué decir!, que para bien o mal estamos insertos en la llamada globalización con lo cual nos vemos expuestos a copiar lo bueno y lo malo de otras latitudes. Este tipo de reacciones tú mejor que nadie sabes donde nacieron, era cosa de tiempo para que nuestros compatriotas copiaran el modelito. De los robos y sensación de inseguridad tenemos para una larga discusión, porque son varios puntos los que confluyen: necesitamos leyes más rigurosas que sirvan efectivamente a jueces y fiscales, una mayor dotación de carabineros, conciencia de barrio donde los vecinos se ayuden y, sobretodo, tal vez ¿por qué no?, abrirse al plan tolerancia cero. Solo espero que de una vez por todas, la mano dura sea ejercida en contra del que daña y vive a expensas de los demás.
Abrazos para ti.
Armando:
Sí. En un pequeño susto...y en el altísimo costo de la reposición de ventanales.Pero por supuesto pudo haber sido bastante peor.Otro fuerte abrazo para ti.
Taty:
Suscribo en todas sus partes tu comentario.Retribuyo con afecto los abrazos.
Es cierto, la delincuencia es el gran mal de hispanoamérica que no latinoamérica pues el primer término engloba a la península ibérica y la américa de habla española y portuguesa y de cultura occidental, es decir, somos los mismos separados por un inmenso océano. "Latinoamérica" es un error de lenguaje y también historico pero la vida está llena de errores conscientemente asumidos por el común pero peor es que el problema sea fruto de la ignorancia, los "latinos" son los habitantes del Lazio italiano, que es la región que engloba por ejemplo a Roma, si unimos esto a los americanos estamos diciendo algo que es metafísicamente imposible y sin embargo...
La inseguridad decía era el primer problema pero ciertamente y si hemos de ser sinceros se trata del segundo en la lista de males ya que el podio es para los que dirijen los países y digo dirigen y no "políticos" ni personas preparadas sencillamente porque no lo son, en realidad son personajillos sectarios que no ven mas allá de sus narices. Ese es el cáncer que hay que extirpar, basta recordar cuantas guerras entre hermanos ha habido desde la independencia de la España de ultramar, cuantos dictadores, cuatos dirigentes electos y honrados pero no es un mal exclusivo, aquí en la vieja España los delincuentes tienen en efecto mas derecho que las víctimas. Un mafioso italiano ante su posible extradición llegó a decir que prefería vivir en una cárcel española que en libertad en Italia. Normal. Techo y tres comidas gratis total al día, gimnasio, piscina, biblioteca, internet, enfermería, vis a vis sexo incluido...y cuando sales después de cumplida tu pena, cobras el paro. Ya quisieran muchos trabajadores tener esa estabilidad en su dia a dia.
no sigo porque me pongo malo solo de pensarlo. Felicidades por la Copa a pesar de lo que hizo el jugador cuyo nombre no recuerdo y que a modo ejemplarizante para niños y adultos debió ser inmediatamente expulsado pero como no lo fue, esto enlaza perfectamente com que los malos son en efecto lo grandes beneficiados de este sistema que no premia la cultura de la excelencia ni el esfuerzo ni el sacrificio sino lo vulgar, lo zafio y por supuesto todo lo que atenta contra los principios básicos sobre los que se asienta el propio sistema que ampara hasta a los que atentan contra él. Solo hay que ver lo que está ocuriendo a dia de hoy en España donde los neocomunistas nos llevan de nuevo a 1936, año en que comenzó la guerra civil. Sabemos como se llegó a ella, -la actualidad es un calco de los años inmediatamente anteriores-, la historia se repite y sabemos también como acabó.
Me alegra leerte de nuevo.
un abrazo
P.D. si quieres encontrarme mi nueva dirección es:
http://pasabaporahinuevaversion.blogspot.com.es
HOLA ESTEBAN: SINCERAMENTE LAMENTO LO OCURRIDO EN TU HOGAR. PERO NO ME SORPRENDE, MAMA Y HERMANA TAMBIEN VIVEN EN UN CONDOMINIO CON GUARDIA Y HACE UNOS MESES TRATARON DE FORZAR LA PUERTA DEL DEPTO, APARENTEMENTE EN ESE MOMENTO SONO EL TELEFONO Y ARRANCARON.
Bienvenido, amigo. Y muchas gracias por la amistosa mención llena de afecto.
Lamento mucho esa mala experiencia por la que has pasado, da mucha rabia y hace sentirse a uno muy impotente; ese violar el espacio propio... ¡qué mal trago! Siento que se generalice en Chile el vandalismo, no lo sabía, es más, aquí se percibe que tu país está en franco camino de prosperidad, lástima que no sea cierto.
Ánimo y un fuerte abrazo.
Ripley:
Gracias estimado Adolfo (en tu nuevo blog, supe tu nombre real). Acerca del mal uso de la expresión Latinoamérica, tienes toda la razón, pero nuestra mala costumbre de adoptar palabras mal dichas simplemente por su arraigo, nos lleva a esas equivocaciones que se convierten en hábito.
Acerca de lo que hicieron ese jugador y otro de nuestra selección de fútbol, por cierto no resultan ejemplos para nadie, por lo cuál dejé de escribir de Copa América en pleno desarrollo de la misma, por los motivos que expliqué en su momento.
El resto de tus consideraciones son igualmente muy valiosas y se nota que te nacen del alma.
Retribuyo tu abrazo intercontinental.
Anónimo:
Generalmente elimino los anónimos, pero en este caso comprendo tu buena intención y te agradezco tu expresión de solidaridad. Viendo las atrocidades que a diario cometen delincuentes en nuestro país, sin duda que tu mamá, tu hermana y mi familia podemos estar aliviados esta vez, por no haber tenido que pasar por situaciones peores.
Gracias tocayo:
Me halaga tu amistad a la distancia. Son precisamente de España desde donde viene la mayor cantidad de los comentarios, al pie de mis artículos.Desde mi Chile, la menor. Bien dicen que nadie es profeta en su tierra.
¡Esteban, ya estás de regreso, qué maravilla!
Me parece que el flagelo de la delincuencia está azotando cada vez más a toda nuestra América. Recuerdo que Chile era muy tranquilo, se podía pasear en la noche, confiar en los taxistas y hasta llevar joyas; al menos así era en el 2002 -2003. Me asusta pensar en el mundo que le hemos dejado a nuestros hijos pues también ha escalado muchísimo la intolerancia y la violencia.
Me alegra que el asunto en tu casa, sólo haya pasado a ser un mal rato momentáneo. Fuera bueno avisar a la empresa de guardianía pues sus vigilantes no han hecho bien su trabajo.
Espero que pases una feliz semana, un abrazo
Rud:
Muchas gracias, por tus cariñosos conceptos hacia mi persona.
Así era, más o menos, por esos años.Bien dicen que "todo tiempo pasado fue mejor". A veces tienen razón.
Deseo también para ti, apreciada amiga colombiana, una feliz semana.
Muchas gracias por la mención, que bueno que estés de regreso y afortunadamente los ladrones no se llevaron nada de tu hogar.
Tocayo:
Solamente se llevaron mi creencia de que en un condominio se está más seguro que en el exterior del mismo. Lamentablemente la delincuencia en mi país ha llegado a situaciones tan insólitas como que en las últimas horas el alcalde de la comuna de La Florida, sector sur de Santiago, sufrió el robo de su propio automóvil tras ser amenazado con armas de fuego.Los malhechores cometieron con ese coche otras fechorías, hasta que chocaron en el vehículo robado, perseguidos por la policía.Entonces fueron llevados a presencia de un juez, quién decidió dejar en prisión preventiva a uno de los sujetos; otro quedó con arresto domiciliario nocturno, mientras dure la investigación, o sea que de día podrá seguir delinquiendo, y el tercero recibió "la terrible pena" de prohibición de acercarse al alcalde, con lo que los restantes 17 millones de chilenos siguen expuestos a sus "maldades". ¡Caramba!
¡Bienvenido Antonio!
Qué tal esas vacaciones? Comprendo el disgusto al sentir violada tu casa! Parece que es contagioso esto de los asaltos. Me alegra que no tuviera malas consecuencias y espero que no haya más. Todo un detalle tu post contestando a todos. Ya sabes que el aprecio es mutuo y es seguro que se cosecha lo que se siembra. Un abrazo grandote
También te agradezco RosaMaria tu llegada y comentario en este post. Ya lo había hecho al pie del actual.
Lo de la respuesta a cada visita me nace desde hace mucho y es un lujo que me puedo dar ya en tiempos de pensionado.
Abrazo.
Gracias RosaMaría por tus dos comentarios.
En efecto, tras la sequía nos hemos inundado en Chile.Es casi un sino inexorable.Personalmente no tengo problemas,ni mi familia.
No es el caso de muchos que sí están gravemente afectados. Es la eterna película de la vida, amiga.
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